Día Siete: Totalmente tuyo
Esta novena incluye: oración inicial diaria, lecturas de los escritos de San Maximiliano Kolbe (KW), intención de oración, “Gracia para hoy” y oración final diaria.
Oración de apertura diaria
Eres toda hermosa, María,
y la mancha original no está en ti.
Eres la gloria de Jerusalén,
tú eres la alegría de Israel,
das honor a nuestro pueblo.
Eres la defensora de los pecadores.
Oh María,
Virgen prudente,
Madre misericordiosa,
ruega por nosotros, intercede por nosotros,
con el Señor Jesucristo.
Oh Dios, que por la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen preparaste una morada digna para tu Hijo, concede, te rogamos, que, así como la preservaste de toda mancha en virtud de la muerte de tu Hijo, que previste, así, por su intercesión, nosotros también podemos ser limpiados y admitidos en tu presencia. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Una lectura de los escritos de San Maximiliano Kolbe
Un alma que se ha consagrado a la Inmaculada hasta ese punto no puede dejar de influir en el ambiente que la rodea, incluso sin ser consciente de ello. Sin embargo, no se conforma con eso y realiza conscientemente toda clase de esfuerzos y hace todo lo posible para ganar también a otras personas para la Inmaculada, a fin de que también otras personas se hagan como ella. Precisamente por ese motivo, en el acto de consagración le ruega a la Inmaculada: “Dispón de mí, si quieres, de todo mi ser, sin ningún reserva, para cumplir lo que fue dicho de ti: “Ella te aplastará la cabeza” [Gen 3,15], y también: “Tu sola has destruido todas las herejías en el mundo entero” [Oficio de la Virgen], a fin de que en tus manos inmaculadas y misericordiosísimas yo llegue a ser un instrumento útil para introducir e incrementar tu gloria todo lo posible en la numerosas almas descarriadas e indiferentes, y para difundir, de tal modo, lo más posible, el bendito Reino del Smo. Corazón de Jesús; donde tú entras, en efecto, obtienes la gracia de la conversión y de la santificación, ya que toda gracia que brota del dulcísimo Corazón de Jesús llega hasta nosotros a través de tus manos”; y añade: “Concédeme alabarte, o0h Virgen Santísima. Dame fuerza contra tus enemigos”.
Esta alma desea conseguir todo eso a costa de su propio trabajo, del sacrificio de todo lo que posee, del sacrificio de sí misma, hasta el derramamiento de la última gota de sangre.
Razón por la cual está dispuesta a servirse de todos los medios lícitos que su estado, condiciones y circunstancias le permitan. (KW 1329)
Intención de oración
Para todas las personas que buscan empleo, educación y vivienda adecuadas.
Padre Nuestro, Avemaría, Gloria.
Oh María, sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti, y por todos aquellos que no recurren a ti, especialmente los enemigos de la Santa Iglesia y todos aquellos que te son recomendados.
Gracia para hoy
Celo por el Evangelio y por la salvación y santificación de todos.
Oración final diaria
¡Virgen Inmaculada!
Tu impecable belleza espiritual
es para nosotros una fuente viva de
confianza y esperanza.
Tenerte como Madre, Virgen Santísima,
nos tranquiliza en el camino de la vida
como promesa de salvación eterna.
Por esto, oh María,
recurrimos a ti
con confianza.
Ayúdanos a construir un mundo
donde la vida humana está siempre
apreciada y defendida,
toda forma de violencia desterrada,
la paz de todos buscada tenazmente.
¡Virgen Inmaculada!
concédenos celebrar y adorar
con fe renovada y amor ardiente
el santo misterio del
Cuerpo y Sangre de Cristo.
En tu escuela,
Oh Mujer de la Eucaristía,
enséñanos a recordar las maravillas
que Dios nunca deja de trabajar en
corazones humanos.
Con ternura maternal, Virgen María,
guía nuestros pasos siempre sobre el
camino del bien. ¡Amén!
– Papa San Juan Pablo II